>

Blogs

Isabel Franco

Yo también tengo cáncer

Mas huesos y más carne

Mientras acabo de culminar mi vuelta a la normalidad, tengo la sensación de que me estoy convirtiendo en lo más parecido que conozco a un milagro andante. Cada día que pasa tengo más claro que deberé agradecer siempre (dure lo que dure esa expresión) a los profesionales de la sanidad pública y a los avances médicos el tiempo de prórroga obtenido. Pero, además, me voy encontrando con nuevas noticias sobre mi evolución que hacen que todo sea aún más asombroso.

Con el mes de enero llega cada año el momento de volverme a conectar a una bomba inyectora, esas maquinitas que tanto nos impresionan cuando recibimos la quimioterapia. El motivo es la inyección de Aclasta, un medicamento que trata de ayudarme a combatir contra la osteoporosis que me dejaron en herencia los tratamientos.

Pues bien, este año el reumatólogo consideró que, puesto que han pasado ya tres desde el diagnóstico, era el momento de hacer una nueva densitometría (la prueba que ayuda a determinar cómo se encuentran los huesos) Me sometí a todo el proceso con la paciencia que trato de dotar a cada gestión que tiene que ver con mi recuperación. La pena es que no guardé los datos sobre la primera que me hicieron, por lo que cuando recogí los resultados no pude comparar para saber en qué situación estaba.

La verdad es que yo esperaba encontrarme peor, más desgastada y cansina, como me sentía en algunas ocasiones. La sorpresa fue mayúscula cuando descubrí con la ayuda de la doctora Da Silva que había mejorado. Sí, sí, mejorado. Y tanto que ya no tengo osteoporosis.

Unos días después el reumatólogo me explicó que mi organismo está recuperando la normalidad, por encima de todos los efectos secundarios que me causaron los tratamientos. Es más, me dijo que mi situación es la de “una mujer sana de tu edad”, como si no quedara huella de esta terrible sensación de vejez que te produce pensar que padeces una enfermedad en los huesos que harán de la tuya una vejez especialmente dolorosa.

Ya estamos en enero de 2012, dentro de unos días se cumplirán 4 años del comienzo de todo este inicio, y yo sigo sumando etapas a mi experiencia en torno al cáncer de manera muy diversa. He tenido que alejarme del grupo que cree para buscar mi camino en el mercado de trabajo, creando para ello mi propia empresa, pero no me olvido de quienes se han cruzado en mi camino durante 2011. Porque este año he tenido la ocasión de comprobar que el Turmalet puede ser un lugar muy cálido, que Pujante no hay más que una y que entre las esposas de los policías locales de Alcantarilla también hay heroínas.  Todas ellas mujeres entrañables, fuertes y emocionales que han superado los tratamientos y la enfermedad.

Con ellas he celebrado el paso del tiempo, la vuelta a la normalidad y he compartido la experiencia intensa y dura que ha marcado nuestras vidas, pero nos ha ayudado a crecer, a conocer nuestra fuerza y también nuestra suerte.

Temas

Experiencias vividas en torno al cáncer por una periodista murciana que ha sobrevivido a la experiencia

Sobre el autor

Periodismo. Social Media. Formación. Aprendiz eterna. Sobreviviente del cáncer. Una entre tantos. Ni más, ni menos.


enero 2012
MTWTFSS
      1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
3031