El atrezzo y la hora de la cita, las cinco de la tarde, causaron cierta desazón en la breve embajada murciana a Madrid, compuesta por Valcárcel, el secretario general José Antonio Ruiz Vivo y el asesor Miguel Ángel Pérez.. En esta ocasión, el presidente Valcárcel y la ministra Cristina Narbona comparecieron juntos en la rueda de prensa tras una reunión de casi hora y media. El panel que había de fondo, con la publicidad ministerial del Programa Agua, no fue del agrado de la comitiva, pero no hubo quejas.
La comparecencia ante los medios de comunicación discurría por cauces tranquilos, remachando las coincidencias y llamando a la cooperación, hasta que al final la ministra aprovechó para recordar las inversiones del Programa Agua en Murcia y el esfuerzo económico de su departamento, que gastará 263 euros por habitantes el próximo año, tres veces más que la media española. Hasta ahí, aceptable. Pero cuando Narbona se preguntó públicamente el por qué de las críticas pasadas, referidas a si se castigaba a Murcia por el trasvase cero para regar (lo calificó de excesos verbales que había que superar), después de todo lo que se estaba invirtiendo y de la sequía general de España, Valcárcel saltó para no dejarle la última palabra a la ministra y poner puntos sobre la íes.
El presidente le reprochó que los números habrían sido diferentes si se hubiera desarrollado el PHN anterior. Delante de los periodistas, le recordó que el PP tuvo la voluntad de aprobar los planes de cuenca del Tajo; Ebro y Segura que el PSOE no se atrevió a hacer. “Si nos hubieran dejado hacer nuestros números, la inversión en la cuenca del Segura habría sido de 1.260 millones de euros”. Tensión en el escenario y fin de la rueda de prensa. Previamente, Valcárcel ya había dejado traslucir su desacuerdo con los 60 hectómetros que ha puesto de tope el Ministerio para trasvasar del Tajo a los regadíos de Murcia. En el despacho de la ministra, Valcárcel le pidió que explicara de dónde salían esos números. “Lo que está ofreciendo el Ministerio con esos 60 hectómetros es el agua que va a caer del cielo. Si eso es así, ¿qué es lo que pone la ministra? Si sólo es el agua de lluvia, la ministra está de más porque su misión, como la de cualquier político, es conseguir los caudales que faltan”, comentó Valcárcel a La Verdad y así lo dejó caer en público de forma más diplomática.
En la trastienda de la reunión, la ministra y Valcárcel discutieron sobre la entrada del Ebro en escena. Plantearlo como un banco de agua resulta una fórmula imaginativa del presidente murciano. La sensación es que Narbona pudo jugar con dos barajas si se atiende a la explicación del presidente. En el cara a cara de ambos, la ministra señaló que se podría ver la posibilidad de que funcionara en el futuro un banco de agua con sobrantes del Ebro, siempre ajustado a la revisión del Plan de Cuenca de aquel río. Pero en la rueda de prensa posterior, la ministra cerró esta opción a cal y canto, a lo cual no le quiso rebatir Valcárcel. Este último le mostró el gráfico de aportaciones en la desembocadura de ese río, y le precisó que incluso con un caudal ecológico superior a los 135 metros cúbicos por segundo se hubiera podido realizar un desembalse en este año tan seco. “Dime tú cúal sería el tope del caudal ecológico”, le requirió el presidente de la ministra para demostrarle que todavía podían quedar excedentes.
La impresión del presidente es que Narbona se ha mostrado más permeable que hace un año a la posibilidad de estudiar nuevas transferencias de otras cuencas. Aunque, a la inversa, la ministra lo ha rentabilizado llevando también el agua a su molino, al felicitarse porque Valcárcel apoye la necesidad de aumentar la desalinización. Narbona abundó en la teoría -avanzada por el ministro Jordi Sevilla el pasado mes de julio en La Moncloa- de que el Gobierno de Rodríguez Zapatero “nunca ha dicho que no se volverá a hacer en España ningún trasvase”.
Mientras el presidente y la ministra trataban de buscar un espacio común para resolver lo más urgente -hubo cordialidad, pese a los roces-, por los despachos del Ministerio se encontraba el director de la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, Isidoro Carrillo, sacando millones de aquí y allá, agilizando proyectos de desalinizadoras y preparando nuevas licitaciones para los próximos Consejos de Ministros. Eufórico, Carrillo destacaba la accesibilidad a todos los departamentos del Ministerio, que tienen la consigna de ‘Murcia lo que necesite’, desalinizando, claro.