DEVORAR A GABO
Hay gente insustituible por una razón sencilla: al morir no solo deja un legado, deja también un vacío. Hablo de García Márquez, que nos ha hecho legatarios de una lección imborrable: la gran literatura no está reñida con la alegría. Quizá fue por eso que llegó a tanta gente. Él escribía como los ángeles y, […]