Por Javier Franco.
Queramos o no, nuestra marca está “digitalizada”. Si hacemos una búsqueda de ella o de nuestra empresa en internet, encontraremos referencias, sí o sí, en sitios propios pero también ajenos.
Y es que pensamos que porque mi marca no tenga un perfil en Twitter, por ejemplo, no se habla de ella, pero nos equivocamos. Hablarán de ella en redes sociales, en blogs… porque nuestra marca está presente y viva en el mundo online, para lo bueno y para lo menos bueno. Es cierto que este mundo es muy amplio y no podemos ni debemos estar “a todas”, pero sí debemos tener presencia propia y correcta en aquellos puntos principales.
He aquí un ranking de dónde/cómo debe estar mi marca para una buena presencia digital:
1- Web. Sin duda es el eje sobre el que debe girar mi presencia y estrategia online. Estudiemos necesidades de mi empresa (mostrar producto, informar, vender…), posibilidades tecnológicas (suscripciones, áreas privadas para clientes, medición del tráfico…), tendencias y exigencias (SEO, responsive, parallax…) y mejoremos.
(1-bis)-Analytics. Se puede mejorar lo que se puede medir y esta herramienta es una de las más desaprovechadas y desconocidas por las marcas. ¿De qué ciudad vienen las visitas a mi web? ¿Cuánta gente entra desde el móvil? ¿Qué les interesa cuando entran en mi web?…
2-Blog. ¿Nada que contar?, ¿seguro?… No se trata de decir todos los días lo buena que es mi marca, mis productos o mis servicios y lo baratos que somos. Se trata de hablar de cosas útiles para mi cliente (actual o futuro). Se trata del Inbound Marketing. ¿Productos de alimentación?, hablemos de recetas, ¿Asesor legal o fiscal?, hablemos de consejos… Ah, y no hace falta que sea ni a diario, ni tan siquiera semanal, pero sí continuado.
3-Redes Sociales. Empecemos por un sí claro: todas las empresas y marcas deberían tener su espacio en la red profesional Linkedin y fomentar la presencia en ella de sus empleados. A partir de aquí el resto de redes (Facebook, Twitter, Instagram, etc.) será cuestión de analizar por producto o servicio, cultura de empresa y recursos. La máxima debe ser “si no estamos, al menos vigilemos y, si estamos, hagámoslo de forma correcta, periódica y continua”.
4-Email Marketing. Quien tiene un contacto tiene un tesoro. Si esta es la filosofía que reina en la estrategia comercial de tu empresa, ¿por qué no trasladarlo al mundo online? Sencillo y accesible, así es como resulta enviar información a través de correo a un cliente (actual o potencial), pero, sin embargo, no aprovechamos esta estrategia lo suficiente para generar un envío periódico (con información útil). Sin lugar a dudas, un gran desconocido.
5-Publicidad y reputación online. Sea a través de SEM, RTB, banners o cualquier otra forma de publicidad, el mundo digital ofrece (a todos los presupuestos) la forma de contactar con nuevos clientes en todo el mundo y en cualquier perfil que busquemos. Aprovechemos estas posibilidades.
Cuida tu marca en el mundo online, porque ten por seguro que te buscarán allí. ¿No vas a estar? O, peor aún, ¿vas a estar de forma incorrecta?