Por mucho que se empeñen algunos, el partido ante el Zaragoza no era de nuestra Liga. El equipo maño está un eslabón por encima que los granas. Sin hacer nada del otro mundo, el equipo visitante se llevó los tres puntos de forma muy cómoda. La goleada, quizás injusta. El partido fue más igualado. Con 1-1 en el marcador, el Real Murcia tuvo sus oportunidades. El árbitro -por un lado- y la calidad de los jugadores maños- por el otro-, volcaron la balanza a favor del Real Zaragoza.
¿Lo positivo? La grada. La afición tuvo paciencia. ¿Lo negativo? Aquino. El chaval sigue sin dar pie con bola y recibió una sonora pitada cuando fue sustituido. Está pasando por uno de sus peores momentos.El 10 grana debe reflexionar.
El Real Murcia, pese a la goleada, sigue con una cómoda ventaja sobre la zona de sombra: seis puntos. La semana que viene, un partido importante no sólo por el rival, el Elche, sino porque los ilicitanos juegan la misma Liga que los pimentoneros. Un empate en el Martínez Valero no estaría mal.