Temprano transito por el cauce del río, barquichuelas flotando, jóvenes pescando con largas cañas, el navegar de los patos y el piar de las gaviotas invasoras anunciando que estamos en el florido mes de mayo.
La naturaleza preñada alcanza su máximo esplendor, y en el hombre, la sangre le fluye con vigor. Las alergias se padecen y expanden alrededor. Los animales culminan su corte de apareamiento y los políticos el suyo de compadreo y apadrinamiento. De la Covid, se mantiene la confusión; preocupación por lo que mañana será, y de seguro, que algo o mucho nos cambiará.
Pero lo importante de este mes es el día de la madre. Y aquí le dedico unas palabricas. Buscas sin encontrar, si no sabes de tus hijos, perdida te sientes.
Das y poco recibes, pero qué importa, con saber que están bien contenta te sientes.
Disfrutas viéndoles crecer día a día y por ellos moriría, a pesar de que en ocasiones les odiaría; son mi vida y mi alegría.
Tu beso, el más duradero, tu cariño el más sincero. El refugio más seguro; es amor limpio y puro.
Porque eres madre: amas, sufres lloras y vives sin vivir.
Todo ello representa el luminoso y colorido mes de mayo, una huida vacacional hacia las tórridas tardes de verano y que hoy comenzamos.
Murcia, 2 de mayo de 2021. Salto del grillo.
Dedicado a todas las madres del mundo. ¡Siendo madre es cuando descubres cuanto te quiere la tuya!