Qué importa cuántos tenga. No es lo que el calendario diga, sino la que mi corazón siente y dicte mi mente.
Tengo los años necesarios para gritar lo que pienso, para ser libre y hacer lo que deseo sin ofender a los que quiero.
Tengo la edad de los sueños cumplidos, de reconocer errores y transmitir a mis sucesores, sabiendo que no podemos reescribir nuestra historia, la vida ha transcurrido como es y no como habíamos planeado.
Tengo la edad en que el amor, a veces, es una llamarada de fuego de una pasión deseada…, y otras, un remanso de paz en una playa olvidada.
Cuantos años cumplo, ¡qué más da!, al hombre al fin conocerás por su vivir, por lo que ha dejado tras de sí.
No sé cuantos cumplo, sé que no dependí de otros para progresar, sé que supe escuchar, que hice lo que sentía y dije lo que pensaba.
No sé cuantos cumplo, pero si tengo recuerdos de lo vivido, deseos de lo desconocido, prontos de alegría, impulsos de llorar y olvidos de amar.
No sé cuantos cumplo, pero esta puede ser mi historia y tomaré el sendero hasta que se apague mi memoria.
No sé, pero quizás el otoño pueda ser la estación más reflexiva para nacer, es decir, para cumplir años, el arbolado comienza a mutar y la vida se renueva….
Murcia, 30 de octubre de 2021