Vigilar el cielo
Es muy probable que el último gesto que queda verdaderamente humano, aquel que solo se explica porque somos de carne y hueso, sea mirar al cielo. Y, como siempre sucede con lo más elemental, apenas lo ejercitamos. Hemos programado el cuerpo para limitar sus movimientos a aquellos que son útiles, productivos. Y, cuanto desborda ese […]