Aunque a lo largo de mi vida profesional he participado en algunas iniciativas innovadoras, quiero aclarar a mis posibles lectores que no soy un consultor experto en la materia. Lo que si tengo es afán por profundizar en las metodologías de aplicación práctica de la innovación así como ideas acerca de la difusión y asimilación de la cultura innovadora en la sociedad en general y en las PYMES en particular.
La verdad es que el índice de temáticas relacionadas con la creatividad y la innovación es tan amplio, tan variado, tan multidimensional, tan crucial para el desarrollo socioeconómico, y por ende, tan apasionante, que es difícil para mí establecer una secuencia lógica en los ítems a tratar y presentar de forma ordenada debido a mis propias carencias personales y a su encaje dentro de las limitaciones que impone un blog.
Me refiero a cuestiones como: creatividad, pensamiento lateral, design thinking, coworking o cosociety, innovación disruptiva, ecosistema innovador, talento, management, smart cities, territorios inteligentes, ciudades de la innovación, economía azul, energías renovables estrategias inteligentes,… conjugadas con las llamadas tecnologías facilitadoras (discontinuidades las llama Gary Hamel): Internet de las cosas, banda ancha, redes sociales, computación en la nube, nanotecnología, biotecnología,…
Pero como siempre, la base son las personas, con sus roles, aptitudes, actitudes, mentalidad, formación, conocimientos, ilusiones, aspiraciones, también con sus defectos. Los gobiernos, las administraciones públicas, las empresas, están dirigidas por personas, en ellas trabajan personas y sus productos y servicios van dirigidos a personas. Así que me ocuparé en las próximas entradas de los aspectos personales ligados a la innovación, empezando por la creatividad.
La creatividad implica diferenciación. Las organizaciones actuales, incluso en el sector público, no se pueden permitir el despilfarro de talento que supone no fomentar la creatividad de los empleados. Es cierto que hay personas más creativas que otras pero también lo es que la creatividad se puede entrenar y perfeccionar. Y también es verdad que cambiar la mentalidad de las personas cuesta mucho. Hay todavía muchos directivos que consideran que perfeccionar la gestión es el único camino posible de mejora de la competitividad de su empresa. Nadie defiende que una empresa no trabaje con calidad, ya que es una condición necesaria para su supervivencia, pero no es suficiente. Sin innovación no hay futuro.
Pasatiempo creativo 3:
Completa la siguiente secuencia lógica: O, S, S, O, O, S, E,….