El pasado viernes, 12 de diciembre, en una gala en el Auditorio Víctor Villegas se entregaron Los Mejores de LA VERDAD de este 2025 que han recaído en el Hospital “Virgen de la Arrixaca” por su compromiso con la salud regional, en “Proyecto Hombre” por esos 30 años apostando por prevenir y tratar las adicciones, el número uno del tenis, Carlos Álcaraz, a Angel Mateo Charris, artista, y a María Dolores Sánchez Medrano, general de las fuerzas armadas.
La Redacción de LA VERDAD asume el compromiso que tiene, como medio de comunicación social, de divulgar a esos protagonistas, según su criterio informativo, que son un ejemplo, por su trayectoria profesional y personal, a la sociedad. Sin duda, barajar nombres y elegir quienes son los mejores de un año, imagino no debe ser nada fácil.
Este compromiso asumido por este periódico hace 37 años, es un evento para toda la sociedad murciana que lo acoge con gran alegría, por ser algo suyo y viene siendo un referente de esta murcianía que tiene a bien elegir y proponer a quienes hacen, se comprometen con su trabajo y defienden un nivel de excelencia.
El hecho de proponer cada año a esos premiados, por su talento y sus sobrados méritos que hacen adquirir este galardón, es un hecho que evidencia lo mucho que hacen y los valores que representan como la perseverancia, empatía, solidaridad, el compromiso por los demás y el trabajo bien hecho. Premiar a los Mejores, para este diario, es apostar por la calidad.
Necesitamos escuchar estos ecos en voz alta de aquellos que se han currado estar ahí y son el espejo donde podemos mirarnos. Son un bello ejemplo para tomar buena nota. Por eso nos alegramos que un medio de comunicación se ocupe de ofrecernos protagonistas y sus trayectorias, porque la ciudadanía necesita visualizar los logros y los éxitos de quienes los labran, de quienes dejan huella y por ello son reconocidos.
Como es tradiciónal en la gala, todos los premiados reciben una escultura simbólica de la mujer en bicicleta, de Antonio Campillo. Durante muchos años, como escribe Manuel Madrid, en Pedaladas de excelencia, el periodista Pedro Soler -fallecido el 26 de noviembre de 2018 escribió largo y tendido en su vida de la obra del maestro Antonio Campillo (1925-2009), autor de la escultura ‘La ciclista’, que reciben los ganadores de estos premios que concede LA VERDAD a destacadas personalidades de la Región de Murcia. Decía Soler que esta pieza es «una simple réplica» que encierra «la evolución profunda y sentida de un gran artista».
La mujer montada en bicicleta, en distintas versiones, es una figura reconocible por los murcianos. «Era una estampa -escribió Soler- que, si ahora abunda por las calles de Murcia, mucho tiempo antes él contemplaba por carriles huertanos. La naturalidad del contexto y el interés que demostró hacia el movimiento le indujeron a esta escultura, tan mimosamente culminada. Como él mismo afirmó, le gustaba que de sus manos brotasen todo tipo de figuras que encerrasen belleza y misterio». La delicadeza de la dureza de los bronces del artista nacido en Era Alta (Murcia) sirve desde su inicio para reconocer la trayectoria de los galardonados por LA VERDAD, diario que entró en circulación en 1903 y ha mantenido desde entonces un compromiso por la excelencia
La gala de Los Mejores siempre se inicia con la presentación del director del periódico. Este año era el primer discurso de Víctor Rodriguez, actual director de LA VERDAD que se dirigió con cercanía a los asistentes, para justificar la valía de los premiados y, además, aprovechar el momento para destacar “la buena salud” que goza este diario, con datos de implantación dentro de prensa regional y nacional, sin olvidar la intención de mejora continua en cuanto a ser un medio que sirva a los intereses de sus lectores y le sirva para su formación. No faltaron en su discurso palabras de reconocimiento a la Región de Murcia como una tierra productora de talentos y capaz de afrontar sus desafíos tejiendo redes y solidaridades.
El director de LA VERDAD realizó una defensa del periodismo y su compromiso inquebrantable con la verdad en la era de la desinformación, recordando una reflexión de la escritora y periodista bielorrusa Svetlana Alexiévich [Premio Nobel de Literatura] en la apertura del libro de Fernando Belzunce ‘Periodistas en tiempos de oscuridad’: «Para mí es muy importante el periodismo, sobre todo ahora, en estos tiempos oscuros, donde parece que las sociedades democráticas retroceden. Creo que los periodistas son los que luchan y salvan la democracia».
Rodríguez apostó por el compromiso del periodismo de calidad y recordó «lo paradójico que resulta que un diario como LA VERDAD, con 122 años de historia, que ha sobrevivido a una guerra civil, a dos conflictos bélicos mundiales y a todo tipo de vicisitudes, se enfrente ahora, al igual que la mayoría de medios serios e independientes de todo el mundo, a unos tiempos en los que el periodismo y la libertad de prensa se ven amenazados por los extremismos, la polarización y la desinformación». En sus palabras demostró su agradecimiento a los suyos, a los compañeros y a quienes le precedieron. Hubo una mención especial a su maestro Alberto Aguirre y un recuerdo entrañable a esos grandes periodistas que fallecieron ( Chimo Cruz, García Martínez, Pedro Soler, J. A. Calvo, Gontzal Diez …) y a otros que se jubilaron dejando una huella imborrable en el periódico.
Todos los premiados manifestaron tener un gran nivel y pudimos comprobar su valía y grandeza, al responder a las preguntas que les hicieron los redactores acompañantes. Los 5 premiados tuvieron respuestas muy valiosas que justificaron porqué fueron elegidos para ser dignos de este galardón . En el escenario pudimos valorar cómo los protagonistas de la noche respondieron a las acertadas preguntas de los periodistas que demostraron el conocimiento sobre los entrevistados y mostraron la calidad de una Redacción que sabe y comunica muy bien, como se comprobó en las preguntas formuladas ante los premiados.
La gala estuvo dirigida por Beatriz Rocamora, conducida por la periodista Rebeca Martínez Herrera y con una propuesta artística original de Cantoría [grupo vocal especializado en la interpretación de polifonía vocal del Renacimiento ibérico y el primer Barroco] y la Orquesta Barroca de la UMU, bajo la dirección de Jorge Losana.