He terminado muy hinchado y hasta las narices de las recientes elecciones americanas de la pasada semana y, sin embargo parece que fueron hace meses, por lo más de lo mismo, como siempre muy a lo made in USA, con tanta puesta en escena y con tanto rebote informativo que ha servido una vez más para demostrar cómo nos dominan, cómo nos tienen enganchados de los pies a la cabeza y encima nos dejamos.
Siempre es la misma letanía, la misma leyenda y el mismo escenario….y es que me revienta ver aquello de que la vida es sueño, en este caso etiquetado cómo el sueño americano de Obama, por cierto al que hay que felicitarle porque ganó la reelección por goleada, aunque su sueño en plena sintonía con muchos ciudadanos pudiera, y lo apunto ser una continuidad de lo que muchos también vendieron de aquel genuino sabor americano ¿lo recuerdan? Me refiero no a Clinton, ni a Bush…era el Marlboro para competir con el Winston… y es que siempre nos venden la moto con descar… pero se lo tienen creído, muy creído… como decía Alan Solomont, embajador de EEUU en España: “gane quien gane, estamos celebrando la democracia”.
Y, a la vez, nos dan lecciones y hasta nos moralizan y nos ponen de ejemplo, en la picota. Nos aluden como país que lo está pasando mal, malamente, nos meten en el saco de los países desgraciados, contaminados que pudiéramos contagiar, como si España no fuera sólo ya different¡ ahora también es picuda – pudiera contaminar -y a la que no hay que dejarla que se derrumbe, como dijo Obama, porque “nos interesa que nos siga comprando y nos podría perjudicar económicamente” y, en otra onda similar, pero mucho más radical, el derrotado republicano Mitt Romney, cuando se refería como ejemplo a España, de lo que no se debe hacer y a lo que no debe tender EEUU, criticando el gasto excesivo de nuestros país.
¡Si señores¡ americanos de pro, demócratas hasta las cejas y convictos ; seguros de su sueño y de su grandeza que nos dan moralina, como si tal cosa y…que nadie se atreva a decir nada, ¡a callar y a dar las gracias¡ que eso es lo políticamente correcto, y además hemos sido citados en sus discursos presidencialistas, ahí va eso¡
Y es que los americanos y también los europeos merkelianos nos miran desde las alturas, por encima del hombro, nos señalan con el dedo y nos meten en el cajón de los enredos con los griegos, los portugueses…los denominados países de baja monta y con problemas, muchos problemas… sin duda, una estrategia que pone en evidencia su aprecio en función de que no les toque a ellos y que así puedan seguir dominando, aunque su querida España bostece y se derrumbe entre sus vueltas de tuerca que nos asfixian y nos encadenan al pago de la deuda, al paro y a la miseria ¿ y eso a quién le importa?
15/11/12/Acuse de recibo/ Javier Ballesta / twitter: @javier_ballesta