Malos momentos para las universidades públicas que ven amenazadas sus arcas y con tantos recortes se van a quedar por debajo de las emergentes privadas. Curiosamente, vemos cómo éstas, las nuevas universidades que nacen bajo el amparo de convenios y empresas, fundaciones de todo tipo y mecenazgos tiran fuerte a la diana, corren que vuelan y deprisa montan de un día para otro másteres, especialidades, grados tan diversos y novedosos que uno tiene la sensación de que todo se cuece a marcha exprés, gracias los beneplácitos de las alturas que las autorizan y a los designios de los todopoderosos que están dando fuerzas a estas iniciativas que son capaces de unir todas las artes, por ejemplo me impresiona que hasta se monten cátedras de flamenco, pasando por gastronomía, moda, en fin una combinación que cuenta con gurús, atletas, cocineros y diseñadores para revitalizar el conocimiento e impartir doctrina o sabiduría de la que corre en la calle, en las estadios olímpicos y en la gente de altura. Lo demás no interesa, es añejo, marginal, no vale, ya pasado no tiene caché… La nueva excelencia se anuncia en los spots publicitarios, en los campeonatos, en los mentideros de la “cultureta” y en los pasillos de los auditorios, de los congresos multitudinarios de lo que sea, no importa, donde se esconde el designio que nos conduce por este desierto aparente, mientras nos amparo el maná de la privatización.
Mientras ocurre este, la universidad pública se desvanece y tiembla por la que le puede venir encima. Ya se vislumbra en el horizonte la falta de apoyos, de dinero y de recursos para seguir adelante que está haciendo daño de frente a todos, desde los docentes contratados hasta el alumnado, pasando por los interinos de administración y servicios que han visto bofeteado su sueldo. En este ínterin, los rectores de las dos universidades públicas de la Región, José Antonio Cobacho, de la de Murcia; y José Antonio Franco, de la Politécnica de Cartagena, presentaron un escrito a los tres grupos parlamentarios en la Asamblea Regional exigiendo que promuevan una enmienda a los presupuestos generales de la Comunidad para que aumente su asignación prevista para el próximo año.
Los rectores alertan de que las instituciones no pueden asumir más recortes, porque está previsto rebajar para el próximo año su dotación a las dos instituciones en un 5%, lo que ha provocado la denuncia de las dos universidades, que se sienten perjudicadas por ello. Unido a ello, ya la semana pasada el rector Cobacho denunciaba en un foro que con la actual tasa de reposición del profesorado, el sistema de educación «se está pegando un tiro en la cabeza». Al parecer todo vale, nadie es imprescindible, todo sigue su cauce. Ya no se cumple aquello del pedid y se os dará, en estos momentos, aumenta el recelo, la competición, el individualismo y el caiga quien caiga, lo demás está por llegar. .