La comisión municipal encargada de investigar la gestión de la Concejalía de Deportes en el Ayuntamiento de Murcia concluye que el 95% de las subvenciones se dieron a dedo, que los conserjes trabajaban sin contrato y cobraban directamente a los usuarios, y que las arcas consistoriales no recibieron ingresos, como consecuencia directa de tamaña irregularidad. Así funcionó la Concejalía durante los cinco años investigados, en los que su titular repartió cuatro millones de euros, en gran parte sin la necesaria concurrencia pública. Vale. ¿Y ahora qué?¿ Ha terminado ya su trabajo la comisión, o exigirán los partidos en ella representados que el exconcejal, hoy diputado regional, asuma cuando menos su responsabilidad política? ¿Sirven de algo las comisiones de investigación?