El monasterio de San Ginés de la Jara abandona la lista roja que elabora Hispania Nostra con el patrimonio en peligro. Una buena noticia que llega justo después de que ‘La Verdad’ publicara un artículo con los avances en las obras de restauración del conjunto franciscano, que hunde sus cimientos en la Edad Media. Hispania Nostra incluye ahora el monumento en su lista verde y, para ello, argumenta que el proyecto se encuentra a un 50% de su ejecución y que los trabajos ofrecen “los primeros resultados reseñables”, como destaca la información aparecida en el diario y elaborada tras una visita al complejo monacal.
Pese al abandono, el deterioro y el expolio sufrido en los últimos tiempos, San Ginés de la Jara conserva aún un porte majestuoso, que da cuenta de su importancia histórica como centro religioso, y un halo de misterio, en mitad de una fértil llanura junto al Mar Menor. La construcción, formada por el propio convento, la iglesia, el campanario y la torre fuerte, data probablemente de finales del siglo XV, pero las edificaciones que han llegado hasta nuestros días se terminaron de levantar hacia 1670.
El conjunto sorprende por sus dimensiones, pero también por la ausencia de materiales nobles. Que nadie espere revestimientos de mármol y pan de oro; los franciscanos eran bastante más humildes y el ladrillo es el gran protagonista. Se puede ver claramente en el claustro, la estancia que va más adelantada, lo que no le resta poderío. El director de las obras, el arquitecto Francisco José Sánchez Medrano, pretende mostrar cómo era el recinto en los siglos XVII y XVIII, cuando alcanzó su máximo esplendor. Y Hansa Urbana, la promotora que corre con los gastos de la rehabilitación, se está esforzando para que los trabajos se conviertan en un referente de buenas prácticas en restauración. Parece que lo está consiguiendo. No solo por el respaldo que acaba de recibir de Hispania Nostra. La Dirección General de Bienes Culturales, que supervisa todas las labores, mantiene que «la obra se está ejecutando con criterios rigurosos de salvaguarda del patrimonio y conforme al proyecto presentado basado en estudios históricos previos».