Todo tiene un precio, aunque no todo está en venta. Por ejemplo, el valor económico de las Casas Consistoriales de Mazarrón, un monumento nacional y emblema del municipio, es de 745.971,96 euros, según el inventario que acaba de aprobar el Ayuntamiento. Y la lista sigue: la mansión de don Zenón del barrio de la Cañadica, levantada a finales del siglo XIX, 94.066,27 euros; el modernista Casino, ahora amenazado por la ruina, 465.310,61, y el centenario camposanto, con algunas destacadas pinceladas de arquitectura funeraria, 1,2 millones. Claro que no todo el patrimonio municipal tiene tanta historia. La citada relación está compuesta por 534 bienes, urbanos y rústicos, que suman 167.779.460,67 euros. El documento tiene su importancia porque resulta una herramienta fundamental en la resolución de posibles conflictos, ya que aporta seguridad a la hora de defender los intereses del patrimonio municipal formado por parcelas, edificios, instalaciones deportivas y hasta montes públicos. Casi todos esos bienes ya aparecen inscritos en el Registro de la Propiedad. Con este trámite, aprobado casi en el último suspiro de la legislatura que acaba de terminar, el listado se actualiza por primera en más de cuatro décadas. El anterior documento databa de 1975 y no se conocía una cuantía económica exacta, así que era una asignatura pendiente que ha llevado varios años de trabajo debido a las dificultades para seguir el rastro de algunas de las propiedades a lo largo del tiempo. El apartado más voluminoso lo forman los inmuebles que cumplen un servicio público, y que suman 86 millones de euros. Ahí se incluyen desde colegios (también las escuelas rurales) a oficinas, plazas de abasto y hasta campos de fútbol. Otro montante de 50,6 millones se lo llevan los bienes de uso público, como jardines, parques y plazas. Además, el Ayuntamiento cuenta con un patrimonio de 11,3 millones en parcelas repartidas por todo el término. La mayoría procede de las cesiones de los desarrollos urbanísticos en zonas como El Alamillo, El Castellar, El Alcolar y Mar de Plata, todas en la costa y que pasaron a manos del Consistorio durante los años del ‘boom’ de la construcción. En el registro también aparece una relación de los montes públicos, que se reparten, principalmente, por las pedanías de Balsicas, Cañada de Gallego y Pastrana. Su valor ambiental ya era conocido, ahora también se sabe que tienen un precio.

Alcaldía de las Casas Consistoriales. PAULA RUBIO