>

Blogs

El abrazo del yerno al suegro

No sé qué me imaginaba, pero desde luego no un trato así. Los últimos correos que Diego Torres se ha sacado de la chistera me han dejado perplejo. En realidad, a estas alturas de la película pocas cosas consiguen sorprenderme. El análisis del contenido de la misiva electrónica lo dejo para quien corresponda. Pero no voy a reprimirme de hablar (escribir) de las formas que el marido de la infanta Cristina emplea con su suegro. Insisto, no sé qué me imaginaba, pero no algo así. Siempre creí que, en público, Reyes, Príncipes e Infantas representaban un papel por cómo se saludaban, por esos gestos ensayados que, a base de tanto repetir, no parecen ni forzados. Pero claro, cuando un lee un mail que, supuestamente, el duque que alardea de estar ‘empalmado’ envía a su suegro… No sé ni cómo seguir estos puntos suspensivos.

Dirigirte a tu suegro, en la intimidad de un correo electrónico que supuestamente tú envías y solo él recibe, con un “Señor, tal y como le he anticipado por teléfono, le adjunto el tema que le quería exponer. Le doy las gracias de antemano”… Pues sí, acabo de llegar a la conclusión de que esa es la diferencia entre una Familia Real y una familia real. La que se escribe con mayúsculas, ya lo ven, se escriben así entre ellos. Las minúsculas, en cambio, son más de andar por casa y esa pompa la sustituirían por un “Oye, suegro, te paso unas líneas de lo que hablamos. Ya me dices”. No, no, el excelentísimo señor don Iñaki Urdangarin se dirige a Su Majestad el Rey de usted. Y se supone que por respeto, más que por distancias, porque lo que le pide el yerno al suegro es, directamente, para que el suegro le ponga en la lista negra de los yernos, en la misma en la que se metió a Jaime de Marichalar, el otrora duque de Lugo.

Y, ojo, que buceando en el correo uno descubre que Iñaki Urdangarin se refería al entonces marido de la infanta Elena como Jaime Marichalar, no Jaime de Marichalar, que es parecido pero no lo mismo.

Bueno, al menos, el yerno, después de pedirle al suegro que mueva sus hilos, se despide con un fuerte abrazo. ¡Demasiado fuerte!

 

 

 

Cuentos de reyes, príncipes y lo que se tercie

Sobre el autor


marzo 2013
MTWTFSS
    123
45678910
11121314151617
18192021222324
25262728293031