Pese al incierto momento histórico que atraviesa España, ayer primó lo anecdótico sobre lo sustancial en la constitución del Congreso de los Diputados. Arrancó la legislatura con más circo que pan, especialmente en la bancada de los debutantes de Podemos, que se hicieron notar en su estreno con una calculada sobreactuación de gestos. En el trasfondo hay mucho tactismo en todas las fuerzas políticas porque en esta fragmentada Cámara se respira aroma de elecciones anticipadas. Los duros reproches de Iglesias a Pedro Sánchez por su pacto con C’s para la elección de la Mesa del Congreso son poco indicativos de un posible acuerdo de investidura entre PSOE y Podemos, que da la impresión de estar posicionándose ya para una nueva llamada a las urnas. Saldremos de dudas pronto.