No tiene ni pizca de gracia que Cartagena haya estado en boca de media España por ese vídeo de un Pleno, por muy ‘chanante’ que sea para quienes les importa poco o nada la gobernabilidad y la imagen de la ciudad portuaria. Alguien debería averiguar qué está pasando allí antes de que pasemos de las tertulias políticas y las parodias televisivas a la rejilla de Cuarto Milenio. Porque tiene su misterio. Es verdad que la conjunción (planetaria) de personajes histriónicos en la Región atiza la emulación y despierta vocaciones, pero tanta reiteración (Novo Carthago, Púnica y ahora esta parodia de gobernanza) quizá se deba a algún compuesto en la vara de esa alcaldía que convendría examinar, una vez solucionado el misterio de las esferas espaciales. No vaya a ser que haya relación, esto sea viral, de verdad, y acabe propagándose a la población.