Iglesias, Rivera y Rajoy creen que Sánchez salió muy tocado del debate y éste afirma que los populares quedaron doblemente vencidos por la ausencia del presidente. Si los cuatro partidos se dan por ganadores, y ninguno ve a Iglesias como gran derrotado (por convicción o por estrategia), habrá que concluir que fue el líder de Podemos quien salió más reforzado del plató. No obstante, el debate decisivo es el del día 14 entre Rajoy y Sánchez, que llega debilitado y con toda la presión sobre sus espaldas por el avance de Rivera e Iglesias. A Rajoy no le ha importado no dar la cara en un debate a cuatro, que ha desgastado sobre todo a su principal rival, si eso le sirve para ganar las elecciones. Pero ojo, Rivera no dirá que no al apoyo del PSOE para ocupar La Moncloa si C’s es la segunda fuerza. Pintan bastos para Sánchez, pero también para Rajoy.