En el verano en que ha vuelto a batirse una llegada récord de turistas a España, el aeropuerto alicantino de El Altet incrementó en agosto un 14,8% el número de pasajeros respecto a 2015 mientras que el de San Javier bajó un 7,2%. Pero Aena, que gestiona ambos aeropuertos públicos, achaca a las compañías aéreas el bajón de tráfico en el aeródromo murciano, pese a su «labor constante de marketing aeroportuario». Suena a excusa barata. A balones fuera. Mientras no pierda dinero, San Javier recibirá la atención justa de Aena, que potencia todo cuanto puede El Altet para recuperar la millonaria inversión realizada en su nueva terminal. Lo más penoso es que ningún responsable político en la Región le pida cuentas a Aena de su gestión aeroportuaria. Menuda ayuda nos presta para impulsar el turismo.