Si encima te encuentras una camada de gatitos recien nacidos dentro de un contenedor, eso ya si que es otro nivel, no es ni humano. En fin, está claro que tiene que haber de todo en este mundo y sin chusma no podríamos diferenciar a las personas decentes.
El caso es que los encontraron sin su madre y con pocas posibilidades de sobrevivir y a riesgo de parecer la tribu de los Brady en mi casa, hemos adoptado a Koira (significa perro en finés y es macho). ¿Por qué ese nombre? ¿Y por qué no? Al final Shiva a veces de comporta como si fuera un gatito y Koira se gasta un genio que no veas…
Así que, otro miembro de la casa que hace que se me caiga la baba. Con Shiva se lleva muy bien, pero Audrey… eso es otra historia. Tiene un carácter que no es normal, así que va a dar bastante juego este enano.
Os dejo un vídeo de mi primer #coffeetime con Koira.
¡Feliz domingo!
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