Mademoiselle (si quiere insultarme llámeme “señora”)
Veamos. Que una esté soltera o casada no debería implicar un cambio en el apelativo. ¿O sí? Hasta la semana pasada, en Francia, las solteras eran “Demoiselles”. Hoy todas son Madame, hayan pasado por la vicaría o no. Pero no sólo eso: en el país germen de la carta de los Derechos Humanos todavía hoy […]