Lágrimas negras
García Martínez – 31 marzo 1993 Están las esquinas, oye, que no hay quien se pare en ellas. Las esquinas de España se han puesto últimamente hechas un asquito. La chorreante humedad produce tremendos desconchados y el personal tiene que bajarse de la acera -con los riesgos que esto conlleva- o cruzar los charcos con katiuskas. […]