Los gatos
García Martinez TENGO la impresión –y si estoy equivocado, corríjame- de que apenas quedan gatos. O, por lo menos, que cada vez hay menos gatos. Antes, en todas las casas decentes vivía un gato. Tú llegabas, ¿no?, y en seguida salía el gato, cargadísimo de razón, con esa felina serenidad tan suya y mirándote con […]