>

Blogs

Inma

Zona de embarque

Ruta por mercados madrileños

Visitar los mercados (y los supermercados) es una forma de conocer “el corazón” de las ciudades.  La propuesta de hoy es casi una “operación a corazón abierto”, pues nos vamos de ruta por tres mercadillos madrileños. ¿Se animan? Los dos primeros: gastronómicos y, uno tercero, que seguro les hará recordar aquel grito de: “¡Viajeros al tren!”.

Si la RAE definiera el Mercado de San Miguel  como “museo gastronómico”, no pecaría de exageración. A quienes se nos van los ojos detrás de un plato bien decorado o de una tapa convertida en “arte culinario en miniatura”, estamos de suerte, pues podremos recorrer el museo con la vista (ya nuestros pies la obedecerán y se unirán a ella). Este mercado es bonito por dentro y por fuera. De día y de noche. De nuevo: ¡sin exagerar! A la hora del aperitivo, cuesta encontrar sitio.

Se encuentra en el barrio de los Austrias, muy cerca de la plaza Mayor. Hay que ir sin prisa para aprender, por ejemplo, cómo comer un erizo de mar, probar los productos de temporada o confiar en que las flores son comestibles y, claro que sí, atreverse con este nuevo universo.

Cambiamos de barrio. La parada es ahora en Chueca, donde encontramos el Mercado de San Antón. Recorrerlo, ahora, es casi como hacer un “viaje gastronómico”. La elección es complicada: comida griega, turca, canaria… Desde unas atractivas piruletas de parmesano hasta, si vamos con más apetito, una hamburguesa. Y aquí de nuevo, la cosa se vuelve a complicar pues: tenemos que elegir entre más de… ¡30 tipos diferentes!  Este mercado tiene en la última planta una terraza al aire libre. En ella se puede tomar el aperitivo viendo todos los tejados y áticos del barrio, que tienen una media de cuatro alturas. Los que somos algo cotillas y se nos va la mirada, sólo un poquito, al interior de las casas, estamos de suerte.

Nuestra tercera visita es, ahora ya sí, en un museo en toda regla. El Mercado de Motores está ubicado dentro del Museo del Ferrocarril. El segundo fin de semana de cada mes, siguiendo las vías de los trenes, se colocan todos los puestos. La mayoría tienen un toque vintage. Hay también un rincón delicatessen donde ofrecen degustación de ensaimadas de Mallorca o anchoas de Santoña, entre otros muchos manjares.

No hay posibilidad alguna de aburrimiento.  Los amantes de la poesía se pararán seguro en el “momento verso”. Una chica con una máquina de escribir antigua escribe su poema, tan sólo con la palabra que le haya indicado el visitante. El precio es “la voluntad”. Recordemos que aquellas viejas máquinas de escribir tenían muy poquito margen de error. ¡Inspiración al sonido de las teclas!

Los que adoran las piezas únicas, aquellas dignas de colecciones o de gratos recuerdos, que vayan con tiempo, pues serán muchos los puestos en los que se paren a curiosear. Que si vinilos por aquí, bicicletas antiguas por allá.

Es de esos lugares donde uno no sabe a qué lado mirar. En una franja están los puestos y en la otra los trenes. Se pueden ver “las entrañas” de las locomotoras, los vagones y los coches. Hay algunas que están seccionadas, otros acristalados para poder ver todo el mecanismo de su complicado funcionamiento o cómo eran los compartimentos de entonces.

Me contaban los guías que Steven Spielberg quedó prendado de una de las vagonetas –concretamente una que cariñosamente la llaman: “el cangrejo”-. Tanto que la utilizó en una de sus películas (“Indiana Jones y la última cruzada”). A cambió donó una cantidad de dinero para el museo. Escenas fílmicas del “Doctor Zhivago” y de algunas series españolas también han sido rodadas en este museo.

Yo tuve que dejar el Museo del Ferrocarril/Mercado de Motores antes de lo que quería  –tenía que coger un tren, ¡coincidencias!-. Y al salir, pasé por uno de sus muchos rincones musicales. Dejé este fantástico lugar escuchando “A mi manera” por unos trompetistas que emocionaban a todos que se paraban junto a ellos.  Yo, si me paraba, perdía el tren.

Me esperaba otra estación también con solera: Atocha. Pero sus secretos, los desvelaremos en otra ocasión.

 

Temas

Curiosidades y crónicas viajeras

Sobre el autor


octubre 2014
MTWTFSS
  12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
2728293031