Treinta decibelios
Es una evidencia médica incontestable que el ruido excesivo destroza la salud. Puede provocar dificultades para conciliar el sueño y para la comunicación verbal, malestar diurno fuerte y agravación de patologías psíquicas preexistentes. El sometimiento a un ruido desorbitado produce traumatismo y pérdidas auditivas, vértigos, perturbaciones en el sistema nervioso central, afectaciones respiratorias, cardiacas y […]