El dueto del Holandés y Senta de la ópera “El Holandés Errante” de Richard Wagner es una de los fragmentos musicales con más emoción de la historia de este género.
Fruto de una vieja maldición, el Holandés vaga eternamente por los océanos y sólo puede pisar tierra cada siete años. Para poner fin a su errante destino, debe encontrar una mujer que le jure fidelidad hasta la muerte. Senta es una joven con mucho mundo interior y una marcada obsesión por la leyenda del “Holandés errante”.
En el momento que se ven por primera vez los personajes del dúo, ambos creen estar en un sueño donde cada uno reconoce la imagen mental que previamente posee del otro. Tras la frase inicial del Holandés “Wie aus der Ferne” (“Como desde la lejanía”) cantada a media voz y sin acompañamiento orquestal, éste transmite un profundo sentimiento de angustia, anhelo y esperanza. A continuación, Senta se expresa con emotiva compasión y le jura fidelidad hasta la muerte.
En el dúo, el papel del Holandés es para una voz de barítono, inicialmente en un registro medio-grave que asciende a medida que recorre pasajes cromáticos y con aceleración del tempo. La dificultad para la soprano lírico dramática consiste en alcanzar el registro agudo y mantenerlo con potencia durante el dueto.
Si creen en el amor a primera vista, les invito a escuchar esta histórica versión con Hans Hotter y Viorica Ursuleac.