A lo largo de esta semana, los aficionados a la buena música clásica nos vamos a dar un festín de la mano de cuatro maestros (tres compositores y un director) muy ligados a la ciudad de Viena.
En sendas programaciones en el Auditorio Víctor Villegas de Murcia y en el Auditorio El Batel de Cartagena, Herr Georg Mark, Profesor de Dirección de Orquesta del Conservatorio de Viena, nos sumergirá en la música de Haydn, Mozart y Bruckner siguiendo los cánones más puros de la tradición austriaca. Para ello, el maestro Mark está dirigiendo a la Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia desde el lunes para preparar estos conciertos.
He tenido la oportunidad de entrevistarme con Georg Mark y me ha resultado una persona muy afable y equilibrada, con ideas musicales claras y sólidas y con una rica formación humanística. Hemos hablado del plato fuerte del programa, la Cuarta Sinfonía Romántica de Anton Bruckner, denominación que para el Profesor de Viena está plenamente justificada por el papel tan importante y omnipresente que tiene la trompa como instrumento musical a lo largo de los cuatro movimientos de la composición.
Para Herr Professor Mark, la trompa recrea el sentimiento romántico con un efecto de encantamiento desde su mágica irrupción en el tercer compás al comienzo de la sinfonía, bajo la que el trémolo crepuscular el sonido oscuro de la cuerda nos mantiene en vilo sobre qué es lo que va a ocurrir. Poco después, en el séptimo compás de este primer movimiento, la trompa toca una enigmática nota Do bemol, que para el director austríaco contribuye a crear esa atmósfera de peligro o miedo y que en el cuarto movimiento (Finale) vuelve a aparecer.
El segundo movimiento Andante es una marcha un tanto fúnebre donde impera la melancolía sobre los sentimientos de duelo y lamento. Le sigue un Scherzo que comienza sobre otro trémolo muy distinto al anterir, con un carácter más luminoso al evocar el despertar de la mañana con la salida del sol. Este movimiento es célebre porque recuerda a una cacería con las enérgicas llamadas de las trompas y por el ambiente campestre que se respira en el Trío que está insertado en el movimiento.
El Finale es un movimiento grandioso con grandes desarrollos y contrastes, ya que hay pasajes donde el miedo se apodera de nosotros alternados con otros que nos traen la alegría y el brillo de la música popular austríaca.
Para el Profesor Mark, Bruckner es el último músico que entendía la sinfonía como un todo y respetaba la forma sonata que inició su compatriota Haydn. Los grandes compositores que le siguieron como Mahler o Shostakovich rompen con esta estructura. Además desde el punto de vista conceptual, si Beethoven era un músico que componía para la Humanidad y Schubert se centró en lo personal o individual, Bruckner, como buen creyente que era, se vinculó más con la idea de Dios y en buscar un buen final para sus sinfonías.
Todavía quedaría mucho que contar, pero ya que hemos comentado la importancia de la trompa en los cuatro movimientos de esta sinfonía, le he pedido al solista invitado José García Gutierrez que nos hable de su cometido en la Romántica. En su opinión, la entrada es muy delicada porque hay que tener una concentración extrema, pero cree que es en el segundo movimiento en el que el trompa debe ser muy versátil para cambiar el color del instrumento según éste dialogue con las maderas, cuerdas u metales. Según García, las cuatro trompas en Fa son muy importantes en esta obra, ya que dispuestas en parejas abarcan el registro agudo y grave, lo que es de gran ayuda al solista.
Esta intensa semana, los músicos de la OSRM están disfrutando con las enseñanzas de este director, que siguiendo la tradición vienesa, apuesta por mantener el carácter, intensidad y dirección melódica de la música para que los oyentes disfrutemos permanentemente conectados con este fantástico programa.
Viernes 15 de abril, 20 h. Auditorio de Murcia. Obertura de La Clemenza di Tito de W.A. Mozart. Sinfonía nº 48 María Teresa de F.J. Haydn. Sinfonía nº 4 Romántica de A. Bruckner. Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia. Director invitado: Georg Mark. Entradas: 14, 12 y 8 euros.
Domingo 17 de abril, 20:30 h. Auditorio El Batel de CartagenaObertura de La Clemenza di Tito de W.A. Mozart. Sinfonía nº 48 María Teresa de F.J. Haydn. Sinfonía nº 4 Romántica de A. Bruckner. Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia. Director invitado: Georg Mark. Entradas: 15 y 12 euros.