Todo intérprete recuerda a la perfección lo que se sintió la primera vez que tuvo un instrumento musical entre las manos. Es el día especial en el que descubrió el tacto del que sería su instrumento.
El protagonista de la historia que les traigo hoy es el hijo de un humilde italiano que sentía pasión por el arte de Gardel y que emigró a Nueva York. Un día, el muchachito de ocho años es acompañado por Vicente, su progenitor, a una casa de empeños neoyorquina. Al salir del local, Astor pasea radiante sosteniendo su primer bandoneón, por el módico precio de 19 dólares.
Este niño, ya no olvidaría jamás ese día tan emocionante. El recuerdo de la feliz jornada perduraría en cada uno de los peldaños de su exitosa carrera como músico. Treinta años después, Astor Piazzolla estando de gira por Puerto Rico, recibe la triste noticia del fallecimiento de Vicente, al que todos llamaban cariñosamente Nonino. La trágica noticia supuso tal mazazo para Astor que no pudo reaccionar hasta que volvió a casa, en la Nueva York que lo ció crecer.
Días después, Astor Piazzolla le pide a su mujer y a sus hijos que lo dejen solo en el salón de la vivienda y tras unos minutos interminables de absoluto silencio, su bandoneón comienza a sonar hasta completar, en sólo 45 minutos, la composición de su obra más lograda, el tango titulado Adiós Nonino.
He rescatado esta bonita historia entre padre e hijo con motivo del concierto que ofrece en la ciudad el pianista Pablo de Torres Pérez (Murcia, 1993), formado en el Liceu de Barcelona y del que hemos hablado anteriormente en Música Inesperada (ver enlace del 23 de febrero de 2014 “El paciente agradecido”). Pablo nos revela que: “la obra Adiós Nonino fue compuesta por Astor Piazzolla en 1959 tras la profunda depresión que le causó la muerte de su padre y la añoranza de su tierra”.
La obra fue escrita inicialmente para bandoneón, pero luego ha sido arreglada para distintas formaciones instrumentales como quinteto, piano y orquesta de cuerdas, dos pianos o piano solo, que es como se la escucharemos a Pablo: “La versión que interpretaré comienza con una improvisación que hizo en un directo Pablo Ziegler, el pianista habitual de Piazzolla, pero tras ser transcrita, se toca con asiduidad como introducción de la pieza.”
De Torres, excelente pianista del repertorio clásico, cultiva un gran interés por la música moderna, el jazz y la improvisación. En cuanto a la música americana del siglo XX, ha tocado obras de Lecuona, Ginastera, Gershwin y del propio Piazzolla. La proposición de su profesor Tensy Krismant de incluir Adiós Nonino en el recital de fin de carrera ha sido clave para que trabajara esta fantástica peiza musical en profundidad: “Me siento cómodo interpretando este tipo de música porque, a pesar de su complejidad formal, rítmica y armónica, no pierde la esencia de la música improvisada, la presencia de elementos de música popular y las armonías jazzísticas que por las influencias musicales que he cultivado, me son muy naturales de entender y asimilar.”
Krismant, el profesor de origen cubano de Pablo de Torres, le ha inculcado que a pesar de que Adiós Nonino es música popular y moderna, hay que tocarla con el rigor y la técnica de la música clásica, ya que “eso es lo que marca la diferencia entre las grandes versiones y las mediocres. O como dice mi profesot, entre las versiones entre pianistas y pianeros.”
Les recomiendo que no se pierdan este concierto. Tiene todos los ingredientes para que ustedes disfruten una gran velada.
Martes 26 de mayo, 20h. Aula de Cajamurcia de Gran Vía de Murcia. Obras de Franck, Rachmaninov, Piazzolla y Gershwin. Pablo de Torres Pérez (pianista).
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Nota: La familia de la Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia estamos viviendo momentos muy difíciles por el reciente fallecimiento de Andrés Vidal, profesor de timbal. Era una persona muy especial y como músico representaba al corazón de la orquesta con sus rítmicos latidos. Desde aquí le rindo mi pequeño homenaje con los apuntes que recogí tras una interesante y entrañable conversación que compartimos sobre música.
Ver: http://ababol.laverdad.es/component/content/article/39-cajon/2594-lla-musica-te-ensena-que-en-la-vida-hay-que-tomarse-las-cosas-con-calma