Hay momentos en los que las circunstancias ponen de manifiesto la importancia que la comida, o mejor, la gastronomía tiene en nuestras vidas y en las vidas de los pueblos. Y uno de esos momentos lo estamos viviendo a raíz del drama en el que un violento seísmo y miles de réplicas posteriores han sumido a una zona de Italia. Los 300 fallecidos por el momento y varias localidades borradas del mapa testimonian la dimensión de la tragedia. Uno de esos pueblos arrasados es Amatrice, una bella localidad de 2.650 habitantes, en la región del Lacio. Y uno de los principles reclamos turísticos de este pueblecito es una sencilla salsa de tomate, elaborada con cebolla, bacon y queso para acompañar la pasta: la salsa amatriciana, que según los rigurosos cánones de los amatricianos debe acompañar, exclusivamente, los espaguettis, no otro tipo de pasta. Pues algo tan trivial (aparentemente) como una salsa para pasta y un luctuoso suceso se han unido en forma de solidaridad. Una serie de referentes gastronómicos se han unido en una propuesta singular: pedir a todos los restaurantes del mundo que incluyan durante un año en sus cartas este plato y que deriven un pequeño porcentaje de los ingresos que hagan con él a una cuenta de ayuda a los damnificados por el terremoto. Bajo el nombre ‘Un futuro para Amatrice (#unfuturoperamatrice), la iniciativa está siendo difundida a través del movimiento ‘Slow food», nacido hace años en Italia para promover la «comida lenta»y luchar contra la estandarización del gusto. Carlo Petrini, fundador de Slow food, hace también un llamamiento a los comensales a que pidan el plato. La idea es que los fondos obtenidos se envíen directamente al Ayuntamiento de Amatrice. Petrini ha significado: «Con este plato simbólico de la historia gastronómica de Amatrice, esperamos difundir los valores de la solidaridad y el intercambio en todo el mundo, típico de la cultura agrícola donde nació».
Ahí va la receta. (Para cuatro comensales)
Salsa amatriciana
400 gr de tomate. Mejor natural, pelado y troceado, pero puede ser entero de conserva.
100 gr de bacon en tiras.
100 gr de pecorino rallado. También podemos usar otro queso semicurado de oveja.
1 vaso de vino blanco
Pimienta negra.
Aceite de oliva.
Unas hojas de albahaca para decorar.