La Semana Santa en el periodo de post-pandemia ha sido como en cantidad de acontecimientos religiosos, culturales, socio-económicos y lúdicos, un hecho que nos ha llevado a valorar lo cotidiano ante la ausencia de actividad por las restricciones. Hemos valorado sin necesidad de pérdida definitiva, valorar un bien por carencia circunstancial del mismo, es una oportunidad que nos ha regalado la pandemia, cuando hemos podido salir a la calle estamos reencontrándonos con el proceso interrumpido y con la alegría de retomar la Semana Santa en 2022, toda la organización de las cofradía, hermandades, agrupaciones, se pusieron con la mayor prudencia, a iniciar el proceso y protocolos para procesionar, con todos los medios que se precisan para salir y disfrutar en toda España y en la Comunidad Murciana, disfrutar de las cuatro municipios considerados por su Semana Santa de Interés Turístico Internacional, Cartagena, Lorca, Murcia y Jumilla. La Semana Santa en España fue declarada Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial en 2017.
Los inicios de las cofradías se remontan a la Baja Edad a comienzos del milenio, entre 1050-1150, el apogeo entre 1150-1350 y 135-1500 se produce un cambio de mentalidad, en los gremios se juntaban con fines benéficos para rendir culto a su patrón.
La religiosidad popular en este periodo impregnaba la vida de los europeos, las pandemias y la peste negra asolaban Europa. Esta evolución a partir del 1500 se va realizando en el mundo iletrado medieval, siendo la imaginería un medio didáctico de mostrar la pasión, muerte y resurrección; fomentándose la religiosidad. En 1521 tras un viaje a Tierra Santa del Marqués de Tarifa, se institucionalizó el Vía Crucis en España, y desde entonces este evento sagrado se celebró con una procesión. Con el tiempo se dividieron en distintas escenas de pasión, con la incorporación de cruces y altares portátiles y desfilaban los grupos instrumentales de las iglesias en la procesión del Vía Crucis.
La Semana Santa es el momento de mayor actividad religiosa en España, procesionando el misterio del cristianismo, la pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazaret. Cada lugar muestra su religiosidad vivenciada y transmitida a través de las cofradías y hermandades de las iglesias locales.
La presencia de la música en las procesiones ha sido una constante, la procesión del Corpus Cristi y las obras musicales que para tal efecto que se realizaban a lo largo del tiempo. Son muchas las obras que están archivadas que sería muy interesante retomar, puesto que las marchas se han ido adaptando a las modas desde el XIX se influencian de Italia con tríos muy románticos; como la marcha de Corpus Cristi de Brulio Urralde Bringas.
En principio son las bandas militares las que interpretan estas marchas procesionales impregnadas de marcialidad, pero la introducción de los porta pasos y las marchas de palio van a demandar un tipo de marchas que se adaptan al fin para el cual se crearon, marchar a ritmo de los que portan los pasos y procesionan.
La producción musical de marchas de procesión es prolija actualmente, máxime cuando hay marchas durmiendo en los archivos. En Murcia se ha celebrado este año el XI Concurso de Composición de Marchas procesionales Villa de San Pedro del Pinatar, concursando 46 personas y se concedieron cinco premios.
La interpretación de las obras del Certamen la realiza la Unión Musical de San Pedro.
Las Bandas de Música somos un colectivo que procesionamos junto a los pasos las cofradías y hermandades y agrupaciones, en toda España, la situación post pandémica ha mostrado el déficit de bandas en esta Semana Santa, han sido muchas las peticiones de la región y del resto del estado para procesionar, sin poder responder.
Las Bandas con la interpretación de las distintas marchas a lo largo del recorrido de la procesión son el nexo de unión, donde los participantes, portapasos, penitentes, cofrades, promesas y cortejos que junto al público participan de este desfile religioso y cultural mostrando en cada lugar la vivencia y manifestaciones. La música aúna a cuantos participan en el acto de la procesión.
Para las Asociaciones sin ánimo de lucro que componemos las Bandas de Música de la FBMRM la participación en las procesiones supone un tercio o un cuarto de su presupuesto anual, de ahí la importancia que supone para nosotros la suspensión de cualquier procesión o actos organizados en torno a la Semana Santa.
La realización del evento religioso en primavera entre el 22 de marzo y el 25 de abril, supone una gran organización y un trabajo durante el año. Este proceso es común en las cofradías, hermandades y agrupaciones y a las bandas, mediante la preparación formativa, siendo un continuo en nuestras escuelas donde se forman más de 10.000 alumnos en toda la región y 5.000 músicos, pertenecen a las bandas escuela, juveniles y titulares, y parte de ellos continúan su formación en los conservatorios de la región.
Este trabajo está sustentado como en las cofradías, hermandades y agrupaciones por voluntarios sin ánimo de lucro de las sociedades y agrupaciones de las bandas, somos dos colectivos colaborando al mismo acto religioso-cultural, con los mismos modos de funcionamiento organizativo, la cercanía y conocimiento mutuo servirá para progresar en la Semana Santa.
Ginesa Zamora Saura
FBMRM